miércoles, 19 de noviembre de 2008




6 VIDAS
Segunda vida:
Cap 03. Explicaciones


En cuanto llegaron a casa Eric, el hermanastro, le explicó a Bea que había visto a Sara con los vándalos pobres del barrio marginal. Bea cogió por el brazo a Sara y se la llevó a la habitación. En el trayecto, le apretó con tanta fuerza el brazo que hundió parte de sus largas uñas en el brazo de Sara. Cuando llegaron a la habitación la tiró al suelo con brusquedad y, después de una larga retahíla de insultos y menosprecios, le dijo que no volviera a ver a esos seres pobres e inmundos sin educación, que ella tenía una imagen y un cierto estatus social y no podía permitirse que ella anduviera con los barriobajeros, dicho esto, le volvió a pegar, pero esta vez con mas fuerza y brutalidad.

Silencio…

Paz…

Paz… sí, increíblemente después de esos golpes a Sara le siguió una oleada de paz interior. Tristeza? También. Pero algo tan banal como una paliza le izo pensar que al fin y al cabo es en esos momentos, cuando más cerca puede llegar a estar de sus padres y hermana. Ya que un golpe en la cabeza, en el sitio idóneo podía acabar con todo eso. Pensó en dejar que la sangre que le recorría todo el brazo derecho y el dolor de las fuertes contusiones provocadas por su tutora legal le invadiesen un rato más el alma. Sin embargo, su consciencia le dijo que era mejor curarse y vendarse la herida con agua, dolió, ya que cuando el agua acariciaba las heridas hacía que saliese más sangre. Se desinfectó la herida y se la vendó. Llegó la hora de la cena. El padre le preguntó a Sara que qué le había pasado en el brazo y, sin dejarle tiempo a reaccionar, Eric, le dijo que había salido con ella y que se cayó sobre unas plantas con espinas y se izo una herida en el brazo. Bea, ‘cariñosamente’, dijo a su marido que ella le había curado la herida y que ya estaba bien. El padre le creyó.
Fin de la cena.

Noche, 1:30 de la madrugada.
Sara no podía dormir así que se sentó en su cama y encendió la luz. Mientras reflexionaba sobre algo, oyó unos ruidos, pequeños golpecitos en la ventana, cuando se giró vio a Jony e Iván. Se preguntó que qué hacía allí que abrió la ventana y, sin preguntar nada, entraron de un salto a la habitación.

Sara se puso el dedo indice en la boca indicando silencio.
(en voz baja):
- Jony: Que haces aquí?
- Iván: Creíamos que no eras una sweetcool...
- Sara: -dice que no con la cabeza y pone cara de que va a llorar-.
- Iván: que te a pasado en el brazo?
- Sara: yo..-se quedó con cara de sorprendida, había hablado!-.
- Iván: *O*!?
Sara les explicó su historia y lo que había pasado cuando Eric le trajo en coche a casa.
Salieron un rato. Era de noche.

3:00 de la mañana.
Bez se levanta de su cama para ir al lavabo, como en el suyo la luz estaba fundida, fue al lavabo de Sara. Pero Sara no estaba en su cama, la buscó por toda la casa y no estaba.
Al día siguiente…

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Perdón perdón perdón, perdón por tardar taaanto en subir pero es que estoy hasta arriba de examenes! y ahora viene los de fin de trismetre :( asíq ue seguramente que hasta que no se acaben no podré subir así que el prox cap lo subiré (seguramente)el dia 1 de setiembre! =)

GRACIAS! gracias a los que la leeis y comentais! gracias de verdad... solo queria pediros un pequeños favor y es, si podeis hacerme un poco de publi, porque de verdad que esto va tirando poco a poco pero muuuy poco a poco =)

GRACIAS.
Sara.
shutupnow_@hotmail.com nuevo MSN!

miércoles, 5 de noviembre de 2008



6 VIDAS
Segunda vida:
Cap 02. Cercano a la muerte

En la habitación estaba Sara de pié, en silencio, frente a su madrastra. Ambas calladas. Sara seguía sin emitir sonido alguno tan solo miraba a su madrastra con incredibilidad. La señora Meassytts, durante los primeros 5 segundos respondió con arrepentimiento e incredibilidad. Luego su rostro se volvió duro y no mostró arrepentimiento alguno ante su acto y las palabras anteriormente dichas. Beatriz salió de la habitación dando un portazo y advirtiendo a Sara de que si el próximo día no salía se repetiría la situación.
Sara se quedó reflexionando en el cuarto, con su mano en su mejilla quedó sorprendida, llorando.

En toda la noche no pudo dormir. Las palabras de su madrastra fueron duras: “-Saber el favor que te hemos al adoptarte?! Se suponía que eras una ‘estrella del espectáculo’ no una niñata malcriada que no hace nada! Ni siquiera hablar! Y, claro, como la niña se pasa el día encerrada en su habitación porque esta taaan triste porque sus padres han muerto POR SU CULPA! ya no habla ni da la cara, NO?! Pero quién te as creído que eres!? AHORA YO SOY TU MADRE! Y tendrás que obedecerme QUIERAS O NO! ENTENDIDO!? A partir de ahora TODO va a cambiar, se acabó la buena vida! PARA EMPEZAR QUIER QUE MAÑANA SALGAS A LA CALLE CON UNA SONRISA Y DICIENDO LO CONTENTA QUE ESTAS DE QUE NOSOTROS SEAMOS TUS NUEVOS PADRES!- le da la bofetada- y como no lo hagas…créeme… te ARREPENTIRAS! NO QUIERO SER EL HAZMEREIR DE TODA LA CIUDAD POR TU CULPA! y si no te gusta este estilo de vida… un consejo: MUERETE! pero no manches más nuestra imagen!-”.

Al día siguiente decidió salir, no porque le tuviese miedo a su madrastra sino porque tenía razón: tenia que salir. Quien sabe, quizás un poco de aire le sentase bien…
No conocía la ciudad y no había nadie en casa así que cogió el móvil y algo de dinero. Caminando caminado llegó a la zona marginal, pobre. Allí vio un cine así que decidió entrar. Compró la entrada y se sentó. Detrás suyo se sentaron tres chicos, uno mayor. Los chicos estuvieron gritando, fumando y molestando a la sala todo el rato y, mientras que todo el mundo se quejaba por que les molestaba. Sara, por primera vez sentía que disminuía su tristeza. Esos chicos eran pobres, sin embargo estaban llenos de vitalidad y eran increíblemente sinceros. Eso le alegraba.
Y recordando las palabras de su madrastra le hacía ver que ahí no todo el mundo era un hipócrita, superficial, preocupado de su imagen… Esos chicos eran diferentes.
Cuando salió del cine:
- ¿?: Hey! Quién eres? Nunca te habíamos visto por el barrio.
- Sara: …- intenta hablar pero no le salen las palabras)-.
- ¿?: Eres muda?
- Sara: - a base de signos le intenta decir que más o menos pero acaba diciendole que sí-.
- ¿?: No pasa nada, nosotros somos Iván- el mayor-, Jona- bajito y muy blanco de piel- y yo soy Pony.
- Sara: *O* - pone cara de sorprendida, le sorprendió el nombre-.
- Pony: y tu eres…?
- Iván: pero no seas idiota hombre! Si es muda como va a hablar?! Pero tu no te preocupes, eh? Te llamaremos… mmm… bueno da igual. Ya se nos ocurrirá algo ;-).
- Jona: y dónde vives?
- Sara: - señala hacia dónde esta su barrio-.
- Jona: !! No serás una ‘sweetcool’!?
- Sara: - pone cara diciendo que no sabe de lo que le están hablando-.
- Pony: una ‘sweetcool’ significa que eres una de esas ricas, cursis, pijas…
- Sara: -dice que no con la cabeza y con intensidad-.
- Jona: entonces? Estas de paso? Eres familiar de alguien?
- Sara: - no sabia como decirlo pero con las manos le dijo que más o menos-.
Después de esta ‘presentación’ le invitaron a tomar algo a un bar y ‘hablar’ un rato. En un par de horas ya se sentía como si les conociese de toda la vida.

A Pony se le habían muerto los padres cuando eras pequeño y tenia dos hermanos (Aitor, el mayor, prácticamente no estaba en casa, sólo para dormir y, a veces, ni para eso, trabajaba muy duro para poder tener cada día un plato de comida en la mesa para sus hermanos; y Soda, tenía 19 años y dejó los estudios para ponerse a trabajar en una gasolinera y ayudar a su hermano Aitor). Pony estudiaba y se esforzaba por sacar siempre excelentes (extraña vez no sacaba un 10 o un 9 y su menor nota fue un 8,5).

Jona vivía prácticamente en la calle, a veces dormía ahí incluso. Sus padres discutían todo el día y no se preocupaban por él. Su padre era un borracho. Y si algún día se ausentaba de su casa nadie se enteraba; por eso Iván era como su hermano mayor y cuidaba de él.

Iván acababa de salir del reformatorio y digamos que era ‘intimo’ de la policía, justicia… Siempre estaba metido en malos rollos, excepto cuando Jona o alguien de sus amigos (eran todos como una familia) estaban metidos en medio.

Como todos estaban tan entretenidos y concentrados en su conversación no se dieron cuenta que se acercaba un Mustang lleno de ‘sweetcools’. En el interior del vehiculo estaba el hermanastro de Sara, Eric, y cuando la vio con esa ‘puchedumbre’ se bajó del coche. Bruscamente la cogió del brazo y sin que le diera tiempo a reaccionar la metió en el coche.


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Gracias a todos lo que la leeis :)

Sara.
cherry_sarita@hotmail.com